Si ya habéis seguido los consejos de los hermanos Scott a la hora de preparar vuestra casa para la venta, en este capítulo os enseñaremos todo aquello que tenéis que tener en cuenta a la hora de realizar la compra más importante de vuestra vida.
Lo primero que Jonathan y Drew Scott recomiendan, y nosotros desde Inmuebles y Exclusivas compartimos, es que tener un agente inmobiliario a vuestro lado es una de las mejores decisiones que podéis tomar a la hora de buscar una casa, aunque tened claro que en última instancia vosotros sois los responsables de averiguar los datos sobre la ubicación de la vivienda y sus características: vecindario, problemas comunes de las casas de la zona, servicios, escuelas y demás. Un buen profesional inmobiliario debería ser capaz de anticipar vuestras necesidades y responder a todas vuestras dudas, pero a veces es necesario que hagáis las preguntas adecuadas.

Cuando exploréis por vuestra cuenta un vecindario, sed escépticos si los residentes mencionan los precios de venta recientes. Los propietarios no pueden resistirse a exagerar voluntariamente las cifras de venta de las casas de su vecindario porque quieren que su vivienda valga más de lo que en realidad vale. ¿Y quién no? Aquí es donde entran los agentes inmobiliarios: el vuestro debería hacer un análisis comparativo de mercado que muestre los precios de venta reales de las casas comparables en vuestro barrio o en la zona en la que queréis comprar. Tened presente que lleva horas preparar una comparativa correcta y exhaustiva, y que implica un análisis detallado de al menos las cinco casas que más se adapten a vuestros criterios. Otras preguntas a las que vuestro agente puede responder son: ¿Cuánto tiempo están en el mercado las casas para reformar en los vecindarios atractivos? ¿Se venden las casas al mismo ritmo en diferentes zonas? ¿Han subido o bajado los precios de manera general en los últimos seis o nueve meses? ¿Cómo es de alto o de bajo el porcentaje de reventa de la ciudad?

La casa que decidáis comprar debe transmitiros buenas vibraciones, pero no podéis dejar que las emociones dirijan vuestra estrategia de compra. Por eso, los hermanos Scott recomiendan hacer una oferta por una casa basada únicamente en los hechos y con la condición de que se pueda hacer una inspección aceptable. El mejor momento para tomar decisiones sobre una propiedad es antes de comprarla. En esa primera etapa todavía podéis echaros atrás aunque hayáis llegado a un acuerdo si se da el caso de que los resultados no alcanzan vuestras expectativas. Cuanta más información tengáis, en mejor posición os encontraréis para hacer una oferta precisa que os deje en una buena situación financiera que os permita hacer los cambios necesarios.
